Martini

Ésta historia y sus personajes están creados por mí, excepto, de momento, dos (los cuales aún no aparecen en el primer capítulo) que están sacados del cómic (y película) Scott Pilgrim, el cual recomiendo plenamente. No obstante, ésta historia puede disfrutarse perfectamente sin habérselo leído. Eso sí, más adelante en la historia cuando aparezcan dichos personajes, quizás os interesa caracterizarlos visualmente, y para éso va a servir mucho ver el aspecto de los actores que interpretan a los personajes en la película.

Me gustaría mucho que comentáseis y que me dijéseis qué errores tengo, dónde tengo que mejorar... Para conseguir que cada capítulo sea más de vuestro agrado. Ya desde el principio, aviso que suelo tardar bastante en escribir nuevos capítulos. Aunque en mi cabeza está todo el guión tengo hasta el cuarto escrito, y si no me da tiempo a escribir más, quizás me ralentice un poco del cuarto en adelante. Pero no os preocupéis, poco a poco, actualizaré.

Sin más dilación, aquí la historia.





No hacía un buen día.




La lluvia no había cesado desde por la mañana, y las nubes indicaban que en el resto de la tarde el mal tiempo no tenía intención de cambiar. Aun así, entrada la noche me dirigí al Cocktail Palace bajo un tambaleante y medio desgarrado paraguas. Como me imaginaba, la lluvia no iba a impedir mi turno de trabajo aquella noche.

Sí, el Cocktail Palace es el asqueroso, apestoso y desagradable antro donde yo, Abigail Sapperstein, de veintidós años, tengo la desgracia de trabajar. Además de tener un nombre poco original -en Toronto la gran parte de los nombres de los bares acaban por “Palace”- tiene un ambiente nauseabundo, siempre huele a alcohol, y además suele estar bastante lleno de gente. Aunque no es problema para los que frecuentan el local, para las personas que trabajan allí es exhaustivo.

Por supuesto, todo estúpido club de alterne, bar, o lo que quiera ser ése sitio, tiene su estúpido uniforme de trabajo. Tuve que enfundarme en alrededor de cuatro abrigos para no pasar frío llevando eso por la calle. Se trata de una fina camisa blanca, una chaqueta negra, una corbata y una falda por encima de las rodillas. Siempre pensé que nuestro jefe quiere hacernos parecer putas para atraer más gente, o algo así. El jefe... Bueno, no tengo ganas de hablar de él, es un caso aparte, dentro de lo que cabe en la categoría "escoria de la humanidad". La cuestión es que el uniforme es incómodo y odio tener que llevarlo.

Llegué al establecimiento en un sprint a lo largo de la calle, ya que notaba que la lluvia estaba volviendo a enfurecerse y mi paraguas antiguo no podría soportar éso. Al abrir la puerta ni si quiera escuché la campanita monótona y retintintineante que suena cada vez que alguien entra, el sonido de la lluvia cayendo con fuerza en la acera la anuló por completo. Joy Rayne ya estaba tras la barra, limpiando con un trapo. Al ver que había entrado, me dedicó una de sus fugaces miradas de “No tengo absolutamente ningunas ganas de estar aquí.” Yo le respondí con la misma mirada, ya que tampoco estaba eufórica por tener que pasarme la madrugada allí.

Joy es mi compañera de trabajo en el Cocktail Palace. Llevo un año conociéndola, desde que entró a trabajar aquí. A pesar de que tiene diecinueve años y ha estado trabajando menos tiempo que yo, siempre he considerado que es más eficiente. Coordina a la perfección sus estudios y su trabajo. Creo que estudiaba astronomía, o no sé, algo del espacio. Al parecer le apasiona, le he visto clavar sus ojos en la ventana observando las estrellas y no despegarlos de ahí en un buen rato.


- Un grandioso día para trabajar, ¿Verdad, Abby? - murmuró Joy con ironía cuando pasé por su lado para aparcar mi bolso en una de las mugrientas esquinas.
- Ya lo creo. - contesté en el mismo tono, contemplando la lluvia tras el cristal.


No había nadie en el bar, Joy acababa de abrir. Pero era cuestión de unas dos o tres horas que aquello se llenase exageradamente, como pasa todos los sábados. Eso es, tengo que pasarme los sábados sirviendo bebidas a la gente desde las diez y media hasta las cuatro de la madrugada. Es el turno que más odio de toda la semana.

Teniendo en cuenta el mal tiempo de aquella noche, tenía la esperanza de que éso desanimase a la gente a salir a la calle tanto como a mí me había desanimado. Pero, cómo no, me equivocaba.

No hicieron falta más de dos horas para ver el Cocktail Palace a rebosar. Aplastando mi especulación anterior, la lluvia parecía ser el motivo principal por la que había el doble de gente allí, ya que intentaban refugiarse de ella. Y, todo sea dicho, el Cocktail Palace es un sitio poco confortable, pero nunca pasas frío. La calefacción es de lo único de lo que no me quejo de todo ése sitio.

Joy bufaba, no se veía muy contenta hoy, dentro de lo que cabe. Lo noté.


- ¿Te pasa algo? - le cuestioné. Ella acabó de servir un whisky, y después me dirigió la mirada.
- Tengo que estudiar. Mucho. Ésta semana estoy muy muy estresada y estar hoy hasta las tantas de la noche despierta... no ayuda. No ayuda nada.


No dije nada, tan sólo le miré comprensivamente y seguí atendiendo a la gente en la barra. Ninguna de las dos establecíamos apenas conversación con ninguno.

Nunca supe por qué, supongo que no es el tipo de personas que nos atrae conocer.





O al menos eso creía hasta aquella noche.

Esta muy bien el capítulo Nebrille, yo no escribo apenás, pero me gusta leer y el comienzo de esta historia es interesante. Me ha gustado.

Espero el proximo capítulo.

Saludos.

Esta muy padre el capítulo espero que agas más.


Saludos.

De echo es tambaleante.

Hay que leer más.

Aún es muy ironico pero me encanto.

Saludos.

Eso es correcto, es tambaleante, pero el corrector de Word me lo dió por bueno. Gracias por indicar la errata.

Evan escribió:

...¿Scott Pilgrim? OMFG. Me encanta xD, aunque nada como el cómic, la película entretiene y tal, pero comparado con el cómic no es nada xD.

Entonces, junto a éste capítulo y al primero deduzco que te será muy, muy, MUY fácil intuir de qué personaje se trata.

Aquí está el siguiente. Es bastante corto, pero bueno. Es lo que hay.




Eran alrededor de las doce, afortunadamente había dejado de llover. La pista de baile se había abierto, ¿Qué significa éso? Música de fondo repetitiva, molesta y que da dolor de cabeza. Y, por supuesto, significa que Damian, el encargado de la música, ya estaba allí. Conozco a Dammy desde hace mucho tiempo y es un buen chaval, pero a veces es un tanto cabezota e ingenuo. Al contrario que a mí, a él no le desagrada el local, piensa que está bastante bien. Hurra por él, que es el que tiene la suerte de trabajar en un sitio que le gusta.

Mientras limpiaba una copa de vino al son de la rítmica y repetitiva música -o como ese conjunto de sonidos pueda llamarse- aprovechando que el barullo se centraba en la pista de baile y que me libraba de servir durante un momento, noté como ligeramente la clientela dirigía su atención hacia algo. Al principio no me importaba en absoluto, pero después reconsideré la idea. ¿Era posible que algún famoso estuviera en el bar? Al menos si se trataba de alguien que admiro, tendría una mínima posibilidad de entretenimiento aquella noche.


No era nadie famoso. De hecho, ni si quiera lo conocía. Al menos no era nadie lo suficientemente famoso como para haber llegado a mis oídos.


Era un hombre. Probablemente de mi misma edad, veintitantos. Iba vestido con una camisa azul bajo una chaqueta marrón oscuro casi negro, y unos pantalones del mismo color. A pesar de no tener aspecto excesivamente estrafalario, había algo que me llamaba la atención de él. No supe determinar el qué.

Quizás era la forma en la que había entrado al bar. La campana de entrada se había convertido en una melodía especial y exclusivamente hecha para su persona. Andaba a pasos despreocupados, y miraba a los lados encontrándose con las miradas esquivas y, en algún caso súbitamente tímidas, de los presentes.
Joy me miraba de reojo a mi lado, al notar que contemplaba con el cejo fruncido lo que estaba ocurriendo en el centro del Cocktail Palace. Después volvió a dejar caer la mirada en otro vaso sucio que limpiar.

Intenté parecer ajena al tema a medida que el muchacho se acercaba a la barra, ya que no quería que se sintiese incómodo. Lo cierto es que le estaba mirando de una manera bastante escalofriante. Intentaba notar qué demonios era lo que destacaba de él.

Mis ojos regresaron al vaso como los de Joy anteriormente, sólo durante unos instantes, hasta que aquella persona estuvo delante mía, apoyado en la barra. Cuando ése momento llegó levanté la mirada y ladeé la cabeza sugiriendo un imaginario “¿Qué desea?”

Hubo un silencio incómodo y después respondió.



- Un Martini.

Muy padre me encanto, no es un pedaso corto esta bién.
Muy chido.
Te felicito. Saludos Nebrille.

Está muy bién el capítulo Nebrille, corto pero bastante bién. Espero el próximo capítulo.

Saludos.

me parece que evan va a estar encantado contigo XDDD la historia es bastante entretenida a mi gusto le daba un 8 XD

siguela anda

nos vemos

Opino como el resto: corto xD. En fin, bastante bien escrito. Solo he encontrado una errata:

hasta que aquella persona estuvo delante mía

Se dice delante de mí.

Por supuesto, continúa ^^

Hasta que aquella persona estuvo delante mio.

Haci.
Saludos Nebrille.

Siento tener que corregirte, navid:

delante mía o delante mío está mal dicho: es delante de mí, tal como dije en mi anterior comentario. Saludos ^^


También puede ser que haya alguna variación entre países, al menos como yo te digo que es me refiero en Castellano, vamos, Español de España.

Yo digo del español tradicional no español de españa ó basco.

Saludos.

No hay que pelear por eso.

Hay que respetar los demas lenguajes.

Lo de otro país lo decía porque no sé de donde eres (y sigo sin saberlo xD), y no, no pienso pelearme por algo así, solo digo que la forma correcta es la que apunté más arriba (no entendí tu comentario de "Español Tradicional", ya que como te digo, en Español se dice de esa manera).

Si quieres lo discutimos por privado xD. Mejor no manchar más este post, de hecho, en unos días borraré este comentario, y estaría bien que borrases los tres tuyos anteriores, ya que criticar, ya criticamos el capítulo y la historia, y esto no favorece al post.

Saludos ^^

Tu eres el que critica yo pienso que faboreser el post seria no criticar dar buen cumplido.
Evancito. De españa.

Saludos a todos.

k exelentisima historia

y vaaaaaaamos bbs

Esperemos que asi aprendais a no manchar con tonterias post de otros, Cierro aqui.