Siempre pensé que había una solución mas fácil que luchar…
siempre la tuve en mente, desde el dia en que mi vida decayó, desde el dia en
que vi. Que estaba solo ante todo y que las personas que una vez me apoyaron me
esquivan, me dan la espalda… siempre tuve en cuenta esa opción para cuando…
volviera a estar solo.
Los días de lluvia como hoy me
causan tristeza y me recuerdan lo que he perdido…
Lentamente subo los peldaños de aquel camino cuesta arriba,
mi vista apuntando al suelo y mi cuerpo empapado hacen de mi un fantasma mas
ahora pálido, tiritando y con la mirada perdida. Durante unos segundos ceso el
andar y miro hacia atrás para contemplar las luces de la ciudad en lo alto de
aquella colina, todas tienen un brillo que hecho de menos… ese brillo que resplandecía
en unos ojos tan bellos de inigualable parecer.
-No creo que deje nada de valor atrás…
lo único que tenia de valor ya no esta.-
-Es dolor lo que siento al pensar
que vuelvo a estar solo, me han vuelto a dar la espalda y mi vida nuevamente
esta rota.-
-¿Estaré sacando las cosas de
quicio? ¿Todo lo que digo esta fuera de lugar? ¿Todo lo que hago esta fuera de
lugar? ¿Es aquí donde yo debo estar?-
Sigo adelante contra el torrente de agua y viento que
atormenta mis últimos momentos en esta trágica vida hasta llegar a la cima, un árbol
de unos escasos tres metros se mecía con el viento que aullaba intentando
posiblemente intimidarme… incluso la naturaleza esta en mi contra ¿pretende
matarme de frió? Esta lluvia me entristece lo suficiente como para sentenciar
aun más mi destino.
Siento decir que no hay vuelta atrás,
no hay vuelta atrás para lo pasado pues… pasado esta.
-¡¿Qué no hay vuelta atrás?! – Grita alguien sobre mí.
En una rama hay algo meciéndose, mis ojos se abren como
platos al ver un ahorcado pero… su cuerpo se agita con el viento y sus ojos están
vueltos ¡¿Cómo puede un cadáver hablarme?! ¡Esta muerto, es imposible que sea
el quien me hable!
-¡Nada es posible cuando se trata de pedir ayuda! – Escuche de
nuevo.
¿Acaso un cadáver de alguien que
hizo lo mismo que yo pensaba hacer intenta darme lecciones de moralidad?
Es bastante probable que tengas razón…
estoy pidiendo ayuda a gritos pero… ¿Quién me oye? Nadie…
Nadie me oye, nadie quiere oírme… es
la única verdad, me estoy viendo abandonado por los míos.
Prefiriendo apartar la mirada de aquel cadáver me refugio
bajo el árbol y saco de mi bolsillo el mp3, hay algo que no consigo comprender
aun… llevo los auriculares a mis oídos y los encajo lentamente, presiono el botón
y la música comienza a sonar.
(*You have my heart And we'll never be worlds apart*)
-Sigo sin entender por que te gusta
esta canción tanto… ¿Por qué?-
-¿Que le encuentras de especial a
esta canción que llama tanto tu atención...?-
-Empiezo a pensar que es lo único
que me queda de ti… pero no capto entender que sientes te transmite siquiera-
-¡Creo que piensas demasiado las cosas! ¿Nunca te han dicho
lo de: “Déjate llevar”? – Volví a escuchar aquel cadáver hablar, me sacaba de
mis casillas que sea el quien me recrimine mi forma de pensar.
-No sabes lo que estoy pasando… tus estas ahí colgado
contando estrellas mientras yo sigo sufriendo ¡Esperando una respuesta que jamás
tendré! – Grite enfadado poniéndome en pie de un salto. ¡¿Es que acaso no tengo
derecho al menos a una negativa?!
-El silencio a veces es la mejor respuesta, ¿no crees? – Me dijo
mientras se reía. Esto es una salida de cobardes… piensa y meditado por un
momento ¿quizás no has esperado lo suficiente? ¿Has hecho lo suficiente?
-Eso no tengo que decidirlo yo… ¡pero no me hagas sentir mal
por cosas que no tienen que ver conmigo!
-¡SI! Tiene que ver contigo idiota, ¿Piensas que todo es tan
fácil como morir? Llevo mucho contando estrellas en este lugar… arrepentido de
lo que no tengo.
Arrepentido de lo que no tengo… yo
me arrepiento de no tener nada, es todo demasiado sangrante y triste, me falta…
el aire cuando pienso que no hay nada que hacer.
Esto se acaba, no puedo evitar
sentir pena por los que dejo atrás pero después de todo… yo soy prescindible, a
quedado demostrado… al menos la primera vez recibí un: “Por favor, olvídame”
Cosa que ni eso tengo ahora.
-¡¿Ves como eres tonto?! – levanto la voz aquel despojo
humano. ¡Quizás no tenga por que decírtelo! Otra frase que jamás entendí fue
¡TIEMPO AL TIEMPO!
-Tiempo es a lo que tengo miedo…
-¡Estoy cansado de perder el tiempo contigo, déjame contar
estrellas si acaso quieres morir… adelante! – Grito enfadado. 781…782…
Quizás tenga razón… quizás pueda
esperar un poco mas, después de todo no pierdo nada y podría ganar mucho.
Con miedo no llegare a nada… con
paciencia… sigo esperando, triste y destrozado… pero sigo esperando.
-Haré algo… - Dije sentándome bajo el ahorcado. Contare
estrellas contigo… cuando esperaremos a mil, será algo así como una cuenta atrás…
¿te parece?
-Tu mismo… si sacas algo en claro con ello, adelante.
-Dicen que no merece la pena... yo sigo aqui para ver si es cierto.